Mientras se lleva a cabo la discusión, trabajadores del Poder Judicial intentaron romper el cerco de la policía de la cdmx, lo que provocó que fueran repelidos con extintores
El senador panista Miguel Angel Yunes Márquez anunció que su voto será a favor de la reforma judicial, por lo que Morena y sus aliados cuentan con los votos necesarios para aprobarla.
Durante la sesión en la antigua sede del Senado, como sede alterna tras la toma de la tribuna por trabajadores del Poder Judicial ocurrida por la tarde, el veracruzano aseguró que no va a restringir su libertad ante amenazas y que busca luchar por un México justo, libre, democrático y seguro.
"México no se va a destruir por aprobar la reforma ni la reforma va a cambiar en automático la realidad de un sistema de justicia que a gritos exige un cambio de fondo", reiteró Yunes Márquez desde la tribuna de la antigua Casona de Xicoténcatl.
Mientras Yunes Márquez se pronunciaba, en los alrededores del recinto, trabajadores del Poder Judicial intentaron romper el cerco de seguridad que instaló la policía de la Ciudad de México en la calle de Tacuba al cruce con Eje Central Lázaro Cárdenas.
Esto provocó jaloneos, lanzamientos de gas, que la Secretaría de Seguridad Ciudadana negó utilizaran los uniformados, y que llegarán más policías de refuerzo al lugar, mientras los manifestantes gritaban "Yunes traidor, vendiste a la Nación".
"No caigan en provocaciones, sin violencia", gritaban un grupo de trabajadores intentando calmar la situación.
Poco después, en la sesión, los senadores panistas tomaron la tribuna gritando consignas y ante los llamados del presidente de la Mesa Directiva a guardar el orden.
En tanto un grupo de legisladoras morenistas intentaban formar una valla humana para proteger al presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, por lo que enfrentaron empujones para evitar para los panistas llegaran a él.
En las afueras de Xicoténcatl, un grupo a favor de la reforma judicial protesta y enfrentan a los trabajadores judiciales, a quienes los divide un grupo de policías capitalinos con escudos en busca de evitar evitar altercados.