Durante 2025, en el Estado de México podría registrarse un incremento de hasta el 7 por ciento en la cifra de incendios forestales en comparación con las cifras registradas en 2024, cuando se reportaron mil 205 siniestros que afectaron 35 mil 440 hectáreas, informó la Protectora de Bosques de la entidad (Probosque).

Alejandro Sánchez Vélez, director general de la dependencia, refirió las condiciones climáticas que caracterizaron al año anterior, considerado el más seco, y la acumulación de combustible en los bosques debido a heladas, generan un alto riesgo para la próxima temporada.

“Ya no solo damos la voz de alarma, sino que estamos en alerta máxima desde el 19 de diciembre, las condiciones son preocupantes, aunque estamos mejor preparados”, señaló.

El funcionario destacó que la mayoría de los incendios son provocados por actividades humanas, como quemas agrícolas y descuidos por lo que llamó a la población a extremar precauciones, además de que advirtió que el periodo crítico comprende del 1 de marzo al 15 de mayo.

También señaló que habrá mayor vigilancia para sancionar a quienes provoquen incendios intencionalmente, como parte de las estrategias para mitigar el impacto de esta problemática en los bosques mexiquenses.

Principales afectaciones en 2024

Los municipios con mayor número de incendios el año pasado fueron Ocuilan, con 102 casos; Nicolás Romero, con 70; Villa del Carbón, con 69; Ixtapaluca, con 65; y Valle de Bravo, con 53 siniestros.

Sin embargo, las mayores afectaciones por pérdida de masa forestal se registraron en Temascaltepec, con 3 mil 431 hectáreas dañadas; seguido de Jilotzingo, con 2 mil 613; Luvianos, con mil 893; Tejupilco, con mil 710; e Ixtapaluca, con mil 589.

Del total de las hectáreas afectadas, el 92.5% correspondió a pastizales y arbustos, mientras que el 5.9% fue de renuevo, y solo el 1.3% correspondió a arbolado adulto.

Plagas, otro factor de riesgo

El titular de Probosque agregó que la pérdida de masa forestal también se ve afectada por plagas como insectos descortezadores y plantas parásitas; en 2024.

Probosque notificó 261 reportes relacionados con estos problemas, que afectaron 842 hectáreas por insectos descortezadores y 5 mil 807 por otro plantas parásitas, lo que equivale a 117 mil 900 metros cúbicos de madera dañada