México no busca traer inversiones a cualquier costo, dice el presidente luego que el secretario de Estado de EU cuestionó la clausura de la mina en Quintana Roo
El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió hoy a Antony Blinken que México no busca traer inversiones a cualquier costo, luego que el secretario de Estado estadounidense cuestionó la clausura de la minera Vulcan Materials en Quintana Roo.
“Nosotros no queremos traer inversión a cualquier precio, mucho menos que venga la inversión a destruir nuestro territorio”, dijo al negar que pretenda expropiar los terrenos de Vulcan y reiterar que es una clausura por los daños causados al medio ambiente.
Un día después de que Antony Blinken advirtió que sería una mala señal para la inversión confiscar las instalaciones de Vulcan, López Obrador respondió que va a continuar clausurada la mina de arena.
“Va a continuar la clausura, no hay expropiación… porque no podemos quedarnos con los brazos cruzados cuando se está violando la ley en nuestro país”, señaló en su conferencia de este miércoles.
“Mientras yo esté de presidente, no vamos permitir que sigan destruyendo el territorio”, enfatizó el mandatario al acusar una campaña de desinformación sobre el tema.
El presidente sostuvo que “sería una aberración” que se permitiera seguir destruyendo suelo mexicano, con un banco de materiales, para que construyan carreteras en Estados Unidos.
Recordó que el tema está en litigio y ve posible “que les dejen a salvo sus derechos, su propiedad”, a la empresa estadounidense, pero sin que exploten o dediquen esa propiedad a un “ecocidio”.
Adelantó que los críticos a su gobierno le van a acusar de detener las inversiones, pero consideró que no se deben permitir a cualquier costo.
“Los que tienen un discurso extranjerizante van a decir que necesitamos la inversión, aunque nos destruyan, aunque vengan a pagar salarios injustos, pero no, México tiene mucho potencial económico y cultural y mucha dignidad”, recalcó.
El jefe del Ejecutivo resaltó que “ya no son los gobiernos de antes”, que eran como “peleles” del intereses del extranjero y recordó que su gobierno hizo una oferta de compra a Vulcan Materials por dos mil millones de dólares, pero la firma estadounidense no respondió.
“Queríamos buscar una salida buena, ofreciéndoles que en el área impactada, íbamos a ver si se podía poner algo ecológico, aprovechando las albercas naturales que provocaron con toda la excavación que hicieron para sacar la arena y la grava”, expuso.