La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo consideró que los fabricantes de armas en Estados Unidos serían “cómplices” de terrorismo, si el Senado de ese país avala que los cárteles de la droga mexicanos sean clasificados como organizaciones terroristas extranjeras, por lo que se analiza ampliar la demanda que México tiene en su contra.

A la par refrendó que no se aceptará ninguna intervención e injerencismo en territorio nacional y refrendó que defenderá la soberanía nacional.

Si llegaran a decretar a grupos de la delincuencia organizada como terroristas, pues tendríamos que ampliar la demanda en Estados Unidos porque entonces, como ya reconoció el propio Departamento de Justicia que el 74% de las armas de los grupos delictivos vienen de Estados Unidos, pues entonces ¿cómo quedan las armadoras y distribuidoras frente al decreto?", dijo la presidenta Sheinbaum.

Y agregó que “los abogados lo están viendo, pero pueden ser cómplices es uno de los temas que estamos revisando”.

En conferencia matutina, la mandataria aseguró que se busca fortalecer las normas mexicanas para enfrentar cualquier intromisión por parte del gobierno de Donald Trump o de cualquier gobierno y también para penar la venta de armas de un extranjero en México.

A nosotros nos corresponde nuestra propia legislación, lo que nosotros no aceptamos es la intervención, el injerencismo y siempre vamos a defender nuestra soberanía”, mencionó Sheinbaum Pardo.

Trump planea designar como organizaciones terroristas extranjeras al Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel del Noreste, la Familia Michoacana y Cárteles Unidos, entre otras.

Sheinbaum destacó que el decreto aún debe ser confirmado por el Senado estadounidense, ante la petición del presidente Trump, y estarán al pendiente.

Y sobre las declaraciones de ayer del general Gregory M. Guillot, titular del Comando Norte y mando de Defensa Aeroespacial de EU, sobre el aumento de sobrevuelos de inteligencia militar en el espacio aéreo internacional, cerca de la frontera con México, la presidenta reiteró que su gobierno se coordina con las autoridades de ese país para compartir información, sobretodo en temas de seguridad, pero dejó en claro que la soberanía no se negocia.

Primero que nada, repito la soberanía no es negociable y nosotros siempre vamos a coordinar sin subordinar, lo importante aquí creo en la declaración, que es lo que siempre hemos planteado es que comparten información con el gobierno de México”, puntualizó.

Son parte, dijo, de actividades que se realizan desde hace tiempo y memorándums que se firman cuando hay reuniones del secretario de la Defensa Nacional o de la Marina con sus contrapartes, o con algunas otras instituciones del gobierno de los Estados Unidos.