La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) impuso una clausura total temporal al Centro de Acopio SAFESA JM, ubicado en el municipio de Lerma, Estado de México, por incumplir la normatividad en el manejo de residuos peligrosos.

La medida se aplicó luego de diversas denuncias ciudadanas sobre un fuerte olor a desechos químicos tóxicos en la zona, por lo que personal de la Profepa realizó una inspección entre el 13 y 14 de febrero, en la que detectó indicios de un derrame de tintas y barniz.

Según la dependencia federal, durante la limpieza del área, las sustancias fueron arrastradas al drenaje que desemboca en un canal de aguas negras a cielo abierto, lo que generó el olor a solvente reportado por los vecinos.

Durante la inspección, la Profepa identificó diversas irregularidades en las instalaciones del centro de acopio, entre la que destaca la ausencia de equipo para atender emergencias y la proximidad del área de almacenamiento de residuos peligrosos a los sanitarios y a una cisterna de agua.

También se detectó que el establecimiento no cuenta con una fosa de retención para captar los lixiviados, carece de un sistema de extinción de incendios y no dispone de equipos de seguridad acordes con la cantidad y tipo de residuos almacenados.

Además, los residuos no estaban etiquetados para advertir sobre su nivel de peligrosidad.

La Profepa informó que dará seguimiento al proceso administrativo para verificar el cumplimiento de las medidas correctivas y demás requerimientos establecidos.

En caso de que la empresa no atienda las observaciones, la dependencia aplicará sanciones adicionales conforme a la normativa ambiental vigente.