Este lunes fueron cuatro microsismos los que se registraron a lo largo del día, dos en Álvaro Obregón y dos más Azcapotzalco, que se suman a los de esta mañana
La Ciudad de México amanece este 19 de noviembre con dos microsismos registrados en la alcaldía Álvaro Obregón, los cuales suceden luego de que este lunes se registraron dos más en esa misma zona y dos más en la alcaldía Azcapotzalco.
El Servicio Sismológico Nacional (SSN) reportó dos movimientos telúricos la madrugada de este martes, ambos con epicentro en la alcaldía Álvaro Obregón.
El primero, de magnitud 1.4, ocurrió a las 05:05 horas, seguido por otro de magnitud 1.7 a las 05:07 horas; ambos sismos se registraron a una profundidad de un kilómetro.
En tanto, en la alcaldía Azcapotzalco ocurrieron dos movimientos telúricos la noche del lunes 18 de noviembre, algo excepcional en esa zona. El primero a las 21:22:03 horas con magnitud de 1.8 y segundos más tarde a las 21:22:49 otro con intensidad de 2.2 grados, ambos ocurrieron a una profundidad de 1 kilómetro.
Como medida preventiva, aproximadamente 200 familias de Azcapotzalco fueron evacuadas por las autoridades locales para realizar inspecciones y descartar posibles daños estructurales.
Y dos microsismos más tuvieron lugar el lunes en la alcaldía Álvaro Obregón, la más afectada por estos eventos, con una magnitud de 1.8 y 1.9 grados. El primero ocurrió en los primeros minutos del día a las 00:10 horas y el segundo ocurrió por la tarde a las 15:01, ambos a un kilómetro de profundidad.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha explicado que estos microsismos, que son sismos con magnitudes menores a 3 grados, no son fenómenos nuevos y son comunes en el territorio mexicano ya que se encuentra en una zona de subducción donde convergen y chocan dos placas tectónicas, lo que genera una actividad sísmica constante.
Especialistas del Instituto de Geofísica de la UNAM han identificado la falla Plateros-Mixcoac como una posible causa de estos movimientos en la capital, pues esta atraviesa diversas zonas de la ciudad y podría estar relacionada con la acumulación de tensión regional y otros factores geológicos que propician la ocurrencia de estos sismos de baja magnitud.